¿Qué piensas que vas a conseguir con todo esto? No lo sé. ¿No lo sabes? No. Puedo aguantar una vida entera pensando. Al fin y al cabo no son tantos años. Puedo escribir lo que pienso. ¿Escribir para qué? ¿Para quién? Para nadie. Para mí mismo. ¿Y por qué demonios no escribes en un cuaderno o en un diario y en vez de eso ventilas tu mierda cerebral en un blog que te cuesta dieciocho dólares al año y además de eso lo haces público? No lo sé. ¿No lo sabes? Sí lo sabes y lo sabes bastante bien. Eres un exhibicionista barato. Te gusta que te vean. Que te lean. Que te observen. Que te admiren. Que te odien. Pero quieres que te conozcan. La verdad que no quiero que me conozcan. No digas eso. ¿No? ¿No estás pendiente todo el tiempo de cuanta gente lee las tonterías que escribes? ¿No te gustaría que te lean mil personas en un día? Si me gustaría. Entonces porque dices o piensas que no eres un exhibicionista. Lo eres y acéptalo. Bueno quizás sí. ¿Quizás? Me da risa tu cobardía. No puedes aceptar lo que realmente eres: Un nudista sentimental. No entiendo porque me criticas tanto si tú eres yo. ¿Somos el mismo no lo sabes? Está bien que yo sea tú. Está bien que sea una voz dentro de tu cabeza. Pero sabes que soy la voz que siempre tiene la razón y por eso critico tus estupideces. Este blog es una estupidez. Esa granada que tiraste cerca a Ramala fue una estupidez. Te grité y te rogué que no lo hicieras pero no me hiciste caso. Y ahí estás cargado de pesadillas y sin poder dormir bien. ¿Sabes por qué? Porque eres un imbécil. No me hables así por favor. Somos el mismo. Somos lo mismo. Pues no lo somos. Yo soy inteligente y tú eres un papanatas. Escribiendo idioteces en un blog. Publicando tus fotos estúpidas en facebook como si a alguien le interesase. Entiende esto: A nadie le importas una mierda. Acéptalo y vas a poder dar un paso más hacia tu propia liberación. Le importo a mi madre. A mi hermano. A mi esposa. A mis amigos. Yo sé que hay gente a la cual le importo. Pues te voy a decir las cosas claras. Tu madre se ha olvidado de ti hace ya bastante tiempo. Tiene una vida a cincuenta mil kilómetros de ti. Tu hermano está mucho más desconectado de ti de lo que piensas. Le importa una mierda lo que escribes y tu manera «irracional» de vivir. Tu esposa. A ella le das lástima. Eres un ser humano que da lástima. Y ella te la tiene. Solo por eso sigue contigo. Solo por eso te mira con algo de pena cada vez que le pides que lea un nuevo post tuyo. Eres un pobre infeliz del que nadie se preocupa. Acéptalo. Supéralo y libérate. Deja de escribir cosas que nadie lee. No pierdas tu tiempo en filosofar. Que si un mundo mejor. Que si un mundo peor. Que el sistema para arriba. Que el sistema para abajo. Vete directamente a la mierda y actúa. ¿Actuar? ¿A que demonios te refieres? Me refiero a que hay que cambiar el mundo por medio de las acciones y no escribiendo estupideces ni pensando en los huevos del gallo. ¿Qué tipo de acciones? Haces preguntas de un niño de cinco años. ¿Cómo se cambian los sistemas. Los gobiernos. Las políticas…? Volando cosas pues. Lo has visto en la guerra. El volar cosas funciona. Realmente cambia las cosas. ¿Estás chiflado? Dices que eres mi voz racional y ¿me aconsejas volar cosas? Por dios. Estás enfermo. No. ¿No que? Los dos estamos enfermos. No somos dos psicópata del infierno. Soy yo solo. No. ¿No que?. Estás hablando conmigo ahora: Somos dos. No me jodas eres la voz que toda persona escucha dentro de sí misma. Claro que soy una voz: Soy tu propia voz y si soy un psicópata que te manda a volar cosas soy tú mismo mandándote a volar cosas. ¿No te das cuenta? No puede ser. Voy a dejar de hacerte caso. Así que mejor cállate. Eres un débil de mierda. Sabes que ese es el camino. La sangre y la pólvora son el detonante del cambio. ¡Cállate! No me voy a callar. Bueno ¿sabes que?. Voy a escribir de está estupidez en ese blog de dieciocho dólares que tanto odias. No me jodas maricón. En serio la gente va a pensar que de además de exhibicionista, estás completamente chiflado. Yo no estoy chiflado. El chalado eres tú. Tú eres yo cretino del demonio. No no no. Tú eres yo. ¿O yo soy tú? Ya me enredaste el cuento psicópata. Ja Ja Ja. Te enredas solo porque además de un manicomio necesitas un profesor de redacción.