En la primera parte de mi vida, no fui nunca una persona activa. Era un niño o un muchacho al que le gustaba moverse poco. Prefería leer o ver televisión a estar haciendo barras o push ups. Nunca me gusto el ejercicio.
Hoy en día soy una persona que ama el deporte. Lo amo porque me hace sentir bien. Porque hace que me vea bien. Porque hace que esté mucho más saludable.
Soy un deportista amateur por unos seis años. He hecho prácticamente de todo. Pesas, running, artes marciales, croosfit. En algunos tiempos me he dedicado un poco más a unos y en otros un poco más a otros. Me ha ido bien y me siento bastante bien.
Suelo intentar que la gente pasiva deje de serlo. Siempre que encuentro a alguien a quien quiero (amigo o familiar) hablando de lo mucho que le gustaría hacer deporte pero que no tiene el dinero o el tiempo para hacerlo, trato de explicarle a veces de buena manera y a veces de muy mala manera, que para mover el cuerpo no necesitas dinero y prácticamente nada de tiempo. Y que toda esas excusas que nos ponemos son solo eso: excusas que evitan que hagamos algo diferente. Que evitan que cambiemos.
Hace mucho tiempo que no pago un gimnasio. Más de cinco años. Así que el dinero no es un factor para determinar el hecho de que estés en forma o no. He descubierto que los entrenamientos cortos y de alta intensidad son incluso mejores que los largos y de baja intensidad (como las máquinas en el gimnasio) Los entrenamientos cortos se pueden hacer con peso corporal y pueden llegar a ser muy exigentes. Incluso extremadamente exigentes. El que piense lo contrario que intente hacer un Murph en menos de cuarenta minutos.
Lo único que quizás se necesita para lograr un entrenamiento exigente es una barra para hacer pull ups. Venden muchos tipos y a muy bajos precios, se pueden instalar en cualquier puerta de la casa. Con una barra la cantidad de ejercicios que se pueden lograr son prácticamente infinitas.
Un ejemplo de ejercicio con peso corporal en casa podría ser un circuito que se vería algo así:
5X pull ups.
10X push ups
15X squats
20X sit ups
Este circuito se podría repetir cuantas veces sea necesario y dependiendo del estado físico de cada uno. Se puede empezar con un circuito y se puede llegar a diez circuitos o más. Para lograr ejercicios más exigentes se puede añadir una kettelbell o un par de mancuernas o una pelota de peso. Así se puede llegar a un nivel de entrenamiento profesional.
El hecho es de que se puede construir ejercicios con prácticamente nada de equipo y llevarlos a un nivel mucho más exigente que en el gimnasio tradicional de pago. El tiempo máximo de entrenamiento no debería ser más de quince minutos para los principiantes y no más de media hora para avanzados, entre tres a cinco veces por semana.
Recomiendo el sistema de entrenamiento Tabata con ejercicios de peso corporal. Un Tabata es realizar un ejercicio durante veinte segundos a alta intensidad con diez segundos de descanso, repitiendo este ciclo por cuatro minutos. Se puede hace uno, dos, tres o hasta cuatro Tabatas que vendrían a ser 16 minutos de ejercicio relativamente intenso. Y que si se han hecho dando todo de uno, pues, de cuatro Tabatas no se puede pasar.
Resumiendo: El dinero no es necesario para tener un entrenamiento exigente (jamás he estado en mejor condición física y solo entreno en casa o en el parque) El tiempo tampoco es un factor. Con sesenta minutos a la semana de entrenamiento se puede tener un excelente estado físico. Con seis horas a la semana se puede llegar a niveles atléticos sorprendentes.
Todo es cuestión de saber organizar los entrenamientos y buscar los que generan más beneficios en mucho menos tiempo. Los ejercicios cortos a alta intensidad generan masa muscular y contribuyen a la quema de grasas. Eso evita que te la pases levantando pesas un día y al otro salgas a trotar cuarenta minutos y entrenes seis veces por semana entre ocho y diez horas para lograr los mismos resultados que tendrías con tres horas semanales de ejercicios bien planificados.
No hay excusa para quedarse quietos. Con equipo o enteramente sin el mismo.
Se puede ser un atleta minimalista. Solo necesitas el peso de tu cuerpo. La calle donde correr y un piso limpio de dos por dos donde entrenar.