Leí por ahí un post de Leo Babauta en la cual contaba su rutina diaria. El vive de su blog y de sus negocios pasivos y por ende se puede permitir una rutina bastante «relajada» e independiente. Supongo que no como la mayoría de nosotros, que solemos trabajar por lo menos 40 horas a la semana en la oficina o en donde sea. Así que decidí escribir un post acerca de lo que yo suelo hacer los fines de semana que es cuando puedo sentir el manejo del tiempo que leo Babauta siente en sus días más rutinarios.
En mis fines de semana trato de ser lo más productivo posible.
En el medio de la semana no necesariamente puedo ser lo que yo quiero ser, por el sencillo hecho de que paso 8 horas en la oficina. Gracias a esas 8 horas tengo que levantarme a una hora específica y regresar a casa a otra bastante exacta también. Mi día se ve bastante supeditado a lo que hago o no hago en el trabajo. Si es que me ha ido bien, pues me quedo de buen humor y feliz como una lombriz. Si me ha ido mal y me he estresado demasiado, esa sensación suele repercutir bastante (al menos en el primer par de horas) después de que regreso a casa.
Eso no me pasa el fin de semana. Los dos días que tengo libres en la semana los manejo como yo quiero. Desde la hora en la cual me levanto hasta la hora en la cual me acuesto. En esas 48 horas puedo ser realmente yo o mejor dicho usar mi tiempo como realmente lo quiero hacer. Te quiero contar que es lo que hago cuando puedo hacer con mi tiempo lo que realmente me gusta hacer:
Me levanto muy temprano:
No pongo la alarma, pero estoy acostumbrado a levantarme todos los días a las cinco y cuarenta de la mañana. Los fines de semana suelo dormir un poco más, pero aún así suelo levantarme apenas sale el sol. Esa sensación de paz y de tranquilidad que hay en la ciudad a las seis de la mañana no tiene precio.
Tomo un vaso con agua:
Después de lavarme los dientes, lo primero que hago es tomarme un vaso con agua. Muchos no saben que durante el sueño solemos deshidratarnos. Así que tomándonos un buen vaso con agua no hacemos más que ayudar a nuestro cuerpo a reponer algo de los líquidos perdidos durante la noche.
Medito:
Mientras mi esposa y mi perro duermen. Mientras la ciudad duerme. Mientras los pájaros comienzan su despertar. Medito. Suelo hacerlo por 20 minutos. Disfruto mucho del silencio. De la letanía del amanecer. Del olor de la tierra mojada por rocío nocturno.
Hago mi mejor café:
Después de meditar, hago café. Lo hago manualmente en la Machinetta italiana. Disfruto mientras lo preparo. Disfruto mientras lo huelo. Disfruto mientras lo tomo.
Me pongo a leer:
Este año me he propuesto leer un libro cada diez días. Y eso es lo que estoy haciendo. Los fines de semana después de mi café es lo que suelo hacer. Leer unos cuantos capítulos del libro de turno. Esta semana estoy leyendo Where Men Win Glory de Jon Krakauer.
Escribo algo:
Escribo para el blog o sino intento hacer un ejercicio literario en facebook. Suelo publicar una foto e intentar escribir una pequeña narrativa interesante para la misma.
Preparo el desayuno:
Cuando mi esposa se despierta, ya tengo el desayuno hecho. Ya me encargue del café y de la tortilla. Ya calenté el pan y ya puse la mesa. Así que: A comer….
Navego por internet:
Los fines de semana intento (casi siempre con éxito) no tocar temas de trabajo. No checkeo mi mail. Solo leo artículos, un poco de noticias y cosas interesantes que me encuentro en el día a día.
Entreno:
Los fines de semana los suelo usar para hacer entrenamientos rigurosos. Si tengo que hacer cargas importantes pues las guardo para el fin de semana. Mis ejercicios están compuestos de levantamientos olímpicos, pesos muertos. Ejercicios con peso corporal (barras, lagartijas, air squats) y Kettelbells. Todo lo tengo en casa así que de la computadora salto al gym en un segundo. Suelo entrenar a muy alta intensidad más de una hora cada día del fin de semana.
Limpio:
Vivir con un pastor alemán en un departamento de 60 metros cuadrados puede ser considerado como una experiencia religiosa. Pero al mismo tiempo. La suciedad, los pelos, la tierra se acumulan bastante rápido. El fin de semana nos dedicamos a limpiar profundamente el departamento, a dejarlo oliendo rico, a ventilarlo y a cuidar y regar las plantas.
Almuerzo:
Bien en casa o en la calle, suelo comer algo sano. Que tenga mucha proteína y que sea rico. Sobre el sabor, prima la calidad de la comida. Trato de comer muchos vegetales, aunque a veces como comida chatarra también. Cuando lo hago entreno mucho más que de costumbre. Es una forma de auto disciplinarme.
Duermo:
Trato de dormir una buena siesta de una hora u hora y media. Siempre me levanto fresco después de la misma. Puedo escribir algo o leer más casi siempre después de dormir.
Entreno número dos:
Suelo entrenar dos veces al día los fines de semana. El segundo entrenamiento es siempre mucho más suave que el primero y está basado en ejercicios de peso corporal a veces a muy alta intensidad. Ejemplo: 100 burpees en menos de 8:30 minutos.
Como un buen snack:
Suelo comer bien después de entrenar. O consumo un shake de proteína y frutas o hago una tortilla de huevos (es verdad, como muchos huevos). Eso me deja bastante tranquilo hasta la cena.
Vuelvo a tomar el libro:
Sigo leyendo y disfrutando.
Ceno:
Siempre guardando las prerrogativas de una comida sana. Aunque a veces los fines de semana solemos salir a cenar a algún restaurante y ahí suelo comer sin muchas reservas que digamos. Disfruto de la comida y del lugar.
Cine o película en casa:
Soy bastante aficionado al cine. Solemos ir mucho y casi siempre lo hacemos los fines de semana. Si no vamos al cine siempre vemos una película o serie en casa.
Duermo 8 o 9 horas:
Los fines de semana trato de dormir mucho. Primero: Porque me gusta dormir. Segundo: Porque es muy sano. Tercero: Porque es parte bastante importante del entrenamiento físico. Te recomiendo encarecidamente, un buen sueño.
Esta es más o menos mi rutina de uno de los días de mi fin de semana. Aunque suele cambiar completamente si salimos de treking o a acampar en algún lugar de Israel. Suele cambiar mucho más si es que me toca irme al ejercito o algo parecido.
Este artículo lo estoy escribiendo justo ahora, en mi fin de semana (en Israel los días libres son el viernes y el sábado o Shabat). Así que hoy es el primer día de mi fin de semana y lo estoy disfrutando mucho.
Gracias por leer.